Sunwaves Roquetas de Mar Arranca con Éxito y una Organización Impecable
El telón de SUNWAVES ha caído, pero el eco de su última jornada resonará mucho más allá de las paredes del recinto. La edición de 2025 se despidió con una clausura que superó todas las expectativas, no solo por la calidad de su cartel, sino por la espectacular conexión entre el público y los artistas, que se elevó a un nivel casi místico. Lo que vivimos anoche no fue un simple concierto, fue una comunión.
Desde los primeros acordes de la tarde, la atmósfera se cargó de una energía tangible.
El público, un crisol de generaciones unidas por el amor a la música, se convirtió en una marea humana que se movía al unísono. No hubo barreras, solo un entendimiento colectivo. Las sonrisas cómplices, los abrazos espontáneos y los cánticos coreados a pleno pulmón demostraban que SUNWAVES es mucho más que un festival; es una experiencia de vida, un punto de encuentro para almas afines.
El clímax emocional llegó con las actuaciones de los cabezas de cartel. Cada artista, consciente de la magnitud del momento, entregó su alma en el escenario. Los vítores atronadores y los aplausos de pie no eran solo una muestra de agradecimiento, sino un tributo a la pasión y al talento que se desbordaba desde las tablas. Los gritos de "¡Otra, otra!" se multiplicaron hasta que la voz se perdía en la inmensidad, sellando un pacto no escrito entre quienes crearon la magia y quienes la recibieron.
Las lágrimas de emoción, tanto en el público como en algunos de los músicos, evidenciaron que se había traspasado la línea de lo profesional para entrar en el terreno de lo humano y lo memorable. Fue en esos instantes de vulnerabilidad compartida donde se forjó la verdadera identidad de esta edición.
Al amanecer mientras las luces se apagaban lentamente, el sentimiento predominante no era de tristeza por el final, sino de euforia y una profunda gratitud. Las ganas de volver ya se notaban en el ambiente, en las conversaciones de la gente que, con los ojos brillantes, se preguntaba: "¿Qué nos deparará el próximo año?".
SUNWAVES 2025 ha dejado una huella imborrable. Ha demostrado que, en un mundo saturado de oferta, la auténtica propuesta de valor radica en la creación de experiencias genuinas, en la conexión humana y en el poder de la música para sanar y unir. Si aún no has vivido esta experiencia, es hora de marcar SUNWAVES en tu calendario. El festival te espera para escribir el próximo capítulo de esta historia que solo acaba de empezar.
SUNWAVES deja en Roquetas de Mar un impacto económico superior a los 2,7 millones de euros
El Festival Sunwaves, celebrado en Roquetas de Mar por segundo año consecutivo, ha dejado un impacto económico superior a los 2,7 millones de euros, consolidándose como un acontecimiento cultural, social y turístico de primer nivel en la zona. Según el informe de impacto económico, social y cultural del Festival Sunwaves 36, más de 3.500 personas de 50 países asistieron al evento, lo que generó un impacto directo de más de dos millones y Sietecientos mil euros para el municipio. El 92% de los asistentes fueron turistas extranjeros, lo que demuestra la proyección internacional del festival.
El evento también supuso la creación de 100 puestos de trabajo temporales en hostelería, seguridad y transporte, beneficiando a pequeñas empresas locales. En cuanto a la proyección mediática, el festival alcanzó una visibilidad en plataformas y medios de referencia como Ibiza Bpm Radio, Instagram, Tik Tok, con un alcance estimado de más de 2,5 millones de personas y 5,5 millones de visualizaciones, lo que aumentó las menciones online de Roquetas de Mar en un 45%.
Pero más allá de las cifras, el último día del festival estuvo lleno de grandes artistas y sorpresas, destacando la actuación del legendario Dubfire. El artista, que retoma su proyecto Deep Dish con Sharam, ha estado promoviendo nuevos talentos a través de su sello, lo que añadió un valor especial a su presentación. La noche alcanzó su clímax con el trío de jóvenes productores Mason Collective, de Manchester, cuyo sonido House fresco y rasgado enloqueció a la arena.
Además, una gran sorpresa fue la experiencia en el Stage 2, que destacó por el sonido puro y underground de artistas rumanos como Suciu, Cezar y Rhadoo, quienes demostraron su know-how y dejaron una gran impresión en los asistentes.
"Finalmente, Ibiza BPM Radio se siente muy orgullosa de haber sido parte de este gran proyecto en un marco inigualable donde se respira camaradería, pasión por la música, muy buena energía, limpieza extrema y una organización maravillosa."
Su equipo, siempre atento y dispuesto a ayudar, demostró una dedicación excepcional, "ganándose un '¡nota mil!' como dicen en Brasil."
Agradecimiento mu espeecial a Ioan , el funador del Festival, carismático donde los haya, siempre amable, disponible y gentil por darnos la oportunidad y confiar en nosotros
Realizado por Esther Rodriguez
